martes, 2 de noviembre de 2010

Pascual te cuenta su momento más geek

Aprovechando el concurso propuesto por Ceci (gracias a que está regalona) y sus amigos de Proudly Geek (que le obsequiaron un par de productos muy copados para regalar a nuestras novias geek o decorar nuestro cubículo y evitar las quejas que no tenemos adornos por parte de las chicas), paso a contarles mi momento más geek que, como dice ella, es ese que te das cuenta que no hay vuelta atrás. Y si bien hay varios a lo largo de mi vida (desde los 6 que me compraron la Commodore 64 ya no hubo vuelta atrás), dejo un par que recuerdo muy bien.

Corrían los años 90, más precisamente mediados de los 90, cuando Kurt Kobain ya estaba bien muerto y el Tropitronic 4 dominaba la escena musical junto al tecno, aparecían películas como Braveheart, 12 Monkeys y L'Appât... y yo estaba terminando la secundaria, en el glorioso Colegio Nacional J. J. de Urquiza (el Tata, para los amigos). También era un buen deportista, practicando varias disciplinas que ahora me canso de solo nombrarlas :P

Pero no nos vayamos por las ramas... Por aquellas épocas, frecuentaba una compañera con la que teníamos "muy buena onda", pero yo tenía un amor muy, pero muy fuerte con el querido Ultima VII The Black Gate :D, que hacía roncha en mi 386DX. Entonces, me encontraba con ella un rato para "hacer lo nuestro" e inventaba cualquier excusa (desde las más serias a las más pelotudas) para poder volver rápido a casa y continuar jugando. Lo triste (o no) era que no importaba la hora que fuese, mil veces estando con ella no hacía otra cosa que pensar en el adictivo juego... y más de una vez he salido corriendo dejándola sola en medio de la madrugada porque tenía que volver a seguir disfrutando del glorioso RPG... Si me pongo a pensar hoy, no sé qué cosas podría decir para irme, teniendo en cuenta que no tenía celular para inventar un "mensaje de emergencia familiar" o similar... pero bue.. de alguna manera funcionaba y yo volvía a ponerme la pilcha del Avatar recorriendo las tierras de Britannia. Si mi amiga en cuestión se está enterando por éste medio, sorry, pero el amor a la PC era más fuerte ^_^

También, tengo una de una vez que cumplía años (22 o 23), yo vivía en Capital, pero para ese fin de semana me encontraba en Entre Ríos. Justo había una LAN party contra un clásico clan rival. Yo me había llevado la computadora desde Capital con monitor y todo (CPUs fabricados en hierro forjado, monitores CRT) en colectivo sólo para éste evento. A mitad de la tarde estaba todo armado y empezaron los disparos virtuales... en el climax de la batalla, viene mi novia de por aquel entonces a buscarme para llevarme a mi casa a cenar, cosa que me parecía muy rara. Así estuvo mucho tiempo hasta que le dije que si, con tal que me deje de joder... cuando llegamos a casa, resulta que habían preparado una cena sorpresa, con toda mi familia, todos mis abuelos y toda la familia de ella... el living todo decorado, la vajilla "de cenas importantes" y un menú para la ocasión... creo que estuve 10 minutos antes de comer a las apuradas y volverme urgente a la LAN, dejando a tooooooooooooooodos los familiares sentados con cara de "éste es un pelotudo" (pensamiento que no habrá cambiado con el tiempo, supongo ^_^)

En fin... esos son los momentos que me demostraron que no hay vuelta atrás y ese era el mundo que me gustaba estar.

lunes, 1 de noviembre de 2010

Pascual se pregunta el significado de "fila"

Fin de semana, viaje en colectivo a Venado Tuerto, nada complicado... pero para hacer más ameno el viaje, voy a ejercitar el viejo y querido pasatiempo de...... ¡observar gente!

Empecemos:

Viernes, 20:30hs... retiramos los pasajes y nos dirijimos a esperar el colectivo a la plataforma...

21:00hs... el colectivo es anunciado en la plataforma 33, por lo que nos paramos donde más o menos quedará la puerta de acceso al mismo (mitad de colectivo).

21:05hs... el colectivo termina de frenar en la plataforma y quedamos segundos, detrás de un señor. La gente que no despacha equipaje hace una cola detrás nuestro y los que despachan, hacen una cola hacia el fondo del colectivo.

21:10hs... seguimos esperando afuera mientras limpian el colectivo, acomodan los asientos y todas esas cosas que deberían hacerse *ANTES* de poner el colectivo listo para salir.

21:15hs... hora de subir. El señor que está delante nuestro (primero en la fila) entrega el pasaje, sube... mientras el chofer está tachando su nombre en una lista, una viejita poco simpática con cara de sufrida se mete delante nuestro y le quiere dar el boleto al chofer, igual que un matrimonio que aparece por el costado. WTF?? Y la fila detrás nuestro para qué es? Para comprar panchos?? En fin, nada que un hombrazo en el costado del señor y un paso adelante de la viejita para que al chofer no le quede otra que agarrar nuestros boletos. Pero cuando todo parecía solucionado, se me ocurre decir "la cola es para allá", señalando a toda la gente con cara de orto que teníamos detrás nuestro. La vieja, como toda vieja sufrida, dice:
"pero yo estaba primera que todas" (WTF 2??).
- No, señora, estaba el señor ese y luego nosotros.
- No, nene. Yo fui a dejar el bolso atrás pero estoy primera.
- ....
El tipo del costado que tira "vamos a subir todos, ¿qué problema hay?"
Yo lo miro para decirle: "si vamos a subir todos, ¿por qué mierda no te vas al final de la fila y respetás a los demás, pelotudo??" pero el rápido empujón de la Srta V hizo que no tuviera tiempo de responderle.

21:20hs... Ya instalados, el colectivo tiene olor a humedad, cosas tiradas por el piso, en fin... todo sea por llegar...

21:30hs... el matrimonio del asiento de atrás empieza a quejarse de las cosas malas del colectivo, generando mal ambiente... claro, por $115 cada uno, no nos faltaba nada para sumarnos a su causa.

22:30hs o por ahí... luego de una rica comida, el asistente de viaje pasa a recoger la bandeja junto a los cubiertos y esas cosas. La operación se realiza sin problemas salvo por la señora de la fila de al lado que estaba paveando en vez de comer. Le dice que pasa luego.

22:40hs... El asistente luego de recoger todas las cosas del piso inferior, va a hacer lo mismo con el piso de arriba, donde más gente va, por cierto. Por esos momentos, la señora (vieja) empieza a gritar "que le levanten la bandeja". Todos miramos.

22:45hs... La vieja se cansa de gritarle al pibe que, por políticas de la empresa (y del sentido común), tiene que atender a todo el colectivo y por eso no vino a levantarle el servicio, se levanta y les va a decir a los choferes que lo hagan. Ellos responden que espere que venga el asistente, cosa que la vieja por supueso no hace y deja la bandeja tirada en el medio del pasillo. Seguramente, ésta señora en la casa tienen 5 mucamas que hacen esa tarea.

22:46hs... El asistente regresa del piso superior a recoger las bandejas que faltan en el piso inferior. La señora dice: "ya te la dejé allá" con una cara agria.

Muchas horas después, luego de regresar del viaje y antes de ir a trabajar hoy lunes por la mañana...

9:45hs... Esperamos el 12 casi la esquina, sobre el cartel indicador... terceros en la fila, detrás de una mujer y un hombre... detrás nuestro, una viejita con problemas para caminar normalmente y 4 mujeres más. El bondi para metro, metro y medio de la parada por el tránsito.. ¿qué ocurre entonces? ¿La gente sube ordenadamente al colectivo? NOOOO, estamos en Argentina! y en pleno Buenos Aires, para colmo! La mujer que estaba última se lanza como Kate Winslet del bote al Titanic, seguida por la que estaba penúltima. ¿Y la viejita con problemas motrices o tooooodos los que estábamos antes que ella en la fila? Bien, gracias. Claro, había pocos asientos libres y era sálvese quien pueda... Ojalá te atropelle un colectivo la próxima, vieja de m...